La evolución del desarrollo desigual y las formas de reproducción social en Grecia

Resumen

Las descripciones oficiales de la desigualdad actual en Grecia destacan la sobreconcentración de actividades económicas, población y riqueza en una única región metropolitana, Ática, y en menor medida en Tesalónica. Según esta hipótesis, las políticas regionales propuestas se centran en la descentralización de la industria mediante incentivos al capital y exenciones fiscales, así como en la ubicación de grandes plantas estatales en las regiones periféricas.

Si bien esto fue así durante las décadas de 1950 y 1960, desde mediados de los años 1970 la situación ha cambiado considerablemente. Desde entonces, se ha producido una descentralización de facto tanto de las actividades productivas como de la población, cuestionando la posición dominante de Ática. Este patrón de desarrollo relativamente nuevo no es exclusivo de Grecia. En otros países europeos, especialmente en el sur de Europa, la descentralización productiva desde mediados de los años 1970 y el papel de las pequeñas y medianas empresas han transformado las estructuras y jerarquías regionales.

Estos fenómenos están pobremente explicados por muchas aproximaciones liberales y marxistas al desarrollo regional. Su atención casi exclusiva a la producción industrial, a los movimientos de capital y trabajo o al empleo «básico» —formal, a tiempo completo, cualificado y masculino— reproduce un determinismo productivo que parece inadecuado para el período actual de crisis y profunda reestructuración. En este artículo intentamos desarrollar una explicación alternativa de las regiones intermedias y, a continuación, analizamos tres ejemplos de estas áreas en Grecia. Dado que nuestra investigación se encuentra en una fase inicial, nuestras conclusiones deben considerarse como cuestiones a investigar más a fondo, más que como respuestas definitivas a un debate que aún sigue abierto.